viernes, 30 de noviembre de 2012

CARTA ABIERTA A PABLO R. SARDINERO

Estimado Ilustrísimo Sr. Alcalde:

Esta semana ha corrido el rumor de que el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid de 3 de agosto de 2011 dice que su sueldo bruto anual es de 77.118,38 €. He tenido que taparme los oídos y ponerme las manos en los ojos como dos de los tres monos sabios de la mitología japonesa para no oír ni leer las barbaridades que se vierten contra usted. No seré yo quien contribuya a engrosar tamañas críticas haciendo demagogia al comparar sus catorce pagas de 5.508,46 € con el Salario Mínimo Interprofesional que el actual Gobierno de la nación tiene congelado en 641,40 €. Parafraseando a su colega y compañera de partido, sería comparar peras con manzanas.

Yo he ejercido durante muchos años, y espero poder seguir haciéndolo, de Director de Recursos Humanos, y si algo he aprendido es que cualquier sueldo, por muy bajo que sea, es excesivo si no se trabaja con ahínco. Del mismo modo, no hay sueldo exagerado si la contrapartida es la esperada.

Se escucha en los mentideros de Arganda que usted trabaja poco y que siempre llega tarde a los actos programados a pesar de tener coche oficial y dos conductores. No haga caso de las habladurías, usted es uno de esos dirigentes que ha nacido para hacer algo grande, uno de esos elegidos por Dios para liderar la humanidad, como dice Aznar en sus memorias. San Mateo (7.16) escribió Por sus frutos los conoceréis,  y usted será recordado, sin duda alguna por la piscina de La Poveda, que si bien es verdad que no es una maravilla arquitectónica, su construcción ha sido tan larga y ha costado tanto dinero a las arcas del municipio, que bien pudiera serlo. También será recordado por la construcción del Colegio San Juan. No se deje influir por las voces críticas que le acusan de que la ceremonia de puesta de la primera piedra fue una maniobra propagandística en precampaña electoral y que tras casi dos años aun no se ha puesto la segunda piedra. Seguro que también criticaron a los promotores de las catedrales de Burgos o de León por su tardanza. Las grandes obras necesitan décadas para completarse en toda su majestuosidad.

Además, si faltan colegios en Arganda, los vecinos siempre pueden seguir el ejemplo de su Alcalde y llevar a sus hijos a los estupendos centros que hay en Madrid. Para eso tenemos una línea de Metro y unas líneas de autobús que son la envidia del mundo entero por su frecuencia y por su precio.

También se le recordará como el Alcalde de los grandes eventos. Las celebraciones del Rock in Rio y del Mandela Day han costado un riñón a los argandeños, pero estamos recibiendo a cambio tales intangibles que no se entiende que nadie pueda criticarlos.

Lo demás son las quejas propias del ejercicio de sus funciones. No puede usted estar en todo. Si tiene que asistir constantemente a inauguraciones y a entregas de premios con comilona es normal que no le quede tiempo para solucionar los problemillas del día a día de una ciudad como Arganda. Ya sabe que muchas veces la gente se queja por quejarse. Se quejan de que han pasado años sin que se asfalte una calle aunque existieran baches como cráteres lunares, y cuando se realiza el asfaltado de algunas de ellas, se quejan porque han desaparecido las líneas y los pasos de cebra. Por cierto, muy bueno lo de llamar plan integral al asfaltado de 5 calles. Felicite de mi parte al artífice de la idea.

El cuidado de las calles y la ordenación tráfico es un tema muy complicado que la gente llana no lo entiende; no comprenden por que no se haya creado ni una sola plaza de aparcamiento nueva en el centro; no comprenden por que se ha incrementado tanto el precio de la zona azul; no comprenden por que se van a crear nuevas zonas de aparcamiento de pago; no comprenden por que algún Concejal puede aparcar en la acera cuando llega tarde a misa. Pero no se esfuerce, no lo comprenderán por muchas explicaciones que les dé.

Yo sé que no es fácil aguantar tanta presión. Las críticas llegan de todos los sectores de la población. Los niños y sus padres se quejan del pésimo estado de los parques, de los columpios en mal estado y de las fuentes sin agua o con los grifos inutilizados. Los deportistas también se quejan de las fuentes de la vía verde, pero es que éstos se quejan por todo; que si la vía verde está en mal estado; que si no tiene iluminación suficiente; que si se han subido excesivamente los precios de la Ciudad Deportiva; que si las instalaciones de la Ciudad Deportiva están sin mantenimiento. Y precisamente ahí, que recoge usted el guante y despide a todos los trabajadores de la Ciudad Deportiva, empiezan a decir que pobrecitos, que con lo buenos que eran (...). Así no hay quien se aclare.

Y qué decir de los jóvenes. Dicen que no existe ocio para ellos en Arganda ¿Cómo que no? No se dan cuenta de que tiene usted un montón de calles a oscuras precisamente para que puedan hacer botellón sin que nadie les moleste. Lo malo de ésto es que siempre hay algún vecino que toca las narices porque no tiene suficiente luz en su calle o porque le molesta el ruido o porque le molesta la suciedad que dejan.

Por otro lado, los trabajadores se quejan del estado lamentable de los polígonos. No se preocupe usted mucho por este colectivo porque cada vez es menor. No hace falta que le recuerde que Arganda tiene una tasa de paro un 35% más alta que la media de la Comunidad de Madrid.

¿Pero qué puede hacer usted contra el paro? La gente, en su ignorancia, pretende que les solucione usted problemas que no son de su competencia. Y lo que no es de su competencia no lo es. Por eso se cerró el Conservatorio. No era competencia municipal y suponía un gasto enorme en tiempos de crisis donde la educación y la cultura son prescindibles.

Igual ocurre con la sanidad. Estoy convencido de que no está en sus manos parar la privatización del Hospital de Sureste, como tampoco pudo evitar el cierre del Centro de Especialidades de Juan de la Cierva. Es del todo injusto que sus trabajadores se quejen de que no ha tenido a bien acercarse a hablar con ellos, de que no se interesa por su situación y por el motivo de sus protestas. A mí me consta que están cada noche en sus oraciones.

De la situación económica del municipio no sé si atreverme a comentar algo, porque a mí me pasa lo mismo que a usted y a los miembros de su equipo, de economía no tenemos ni idea. ¿No le parece que una deuda municipal de más de 100 millones de euros es un poco elevada para una ciudad de poco más de 50.000 habitantes? ¿No cree que crear nuevas tasas además de subir las ya existentes, añadido a la subida del IBI entre un 17 y un 30%, para poder pagar esta deuda puede originar algo de malestar entre los vecinos? Pero basta ya de hablar de deudas y de subidas de tasas e impuestos que me va a tomar por el típico vecino protestón.

De lo que si que no voy a decir nada es de la vergüenza que sentimos los habitantes de Arganda cada vez que aparecemos en los medios de comunicación por la trama Gürtel. Se de buena tinta que está haciendo  lo indecible para depurar responsabilidades. Un claro ejemplo ha sido Juan Fernández,  Gerente de la Sociedad de Fomento. Nada más conocerse su imputación, en apenas tres años, se le relegó de su cargo. Otro gallo nos cantaría si el Tribunal Constitucional fuese tan ágil como usted.

Sin embargo, mis lectores no me perdonarían que cerrara esta misiva sin haberle hecho ni una sola crítica, por lo que muy a mi pesar, y por favor, no me lo tome a mal, voy con ello. Se dice de usted que es una persona altiva y que no escucha a sus vecinos ni a sus colaboradores, que vive usted en un pedestal. Le rogaría, por su bien y por el de todos nosotros, que cambie usted de actitud en ese sentido, que escuche a los que tiene debajo. Porque como escribió Benedetti aquí abajo, abajo, cerca de las raíces, es donde la memoria ningún recuerdo omite.

Atentamente,

Un vecino

domingo, 25 de noviembre de 2012

"TODOS" SOMOS IGUALES

La semana pasada denunciaba en este mismo blog que el Ayuntamiento no trata por igual a todos los vecinos de Arganda con la entrada AGUDEZA VISUAL.

Lo hacía porque a los nuevos residentes del Paseo de la Estación nos tienen sin contenedores de basura y sin alumbrado público pese a que las viviendas se entregaron hace más de diez meses. En lugar de hacer caso a las demandas de los vecinos y colocar bombillas en las farolas y arreglar los impracticables contenedores, el Ayuntamiento colocó señales prohibiendo aparcar y acto seguido comenzó a multar.

No puedo deciros, como esperaba, que la denuncia no ha servido para nada porque si que se ha producido un cambio. La Policía Municipal ha dejado de multar a los coches mal aparcados y en su lugar coloca en el parabrisas de los vehículos la siguiente nota informativa:


¿Qué capacidad de escucha tiene nuestro Alcalde?¿De verdad piensa que lo que nos molesta es que se multe a los coches mal aparcados?¿Piensa que eso es lo grave?¿Piensa que si deja momentáneamente de multar olvidaremos que no tenemos luz en nuestra calle?

Pues no Sr. Rodríguez Sardinero. Lo que nos molesta es que nos traten de forma discriminatoria. Estamos dispuestos a pagar tasas e impuestos, e incluso multas, si cometiéramos alguna infracción. Lo que pedimos es que se nos trate como al resto de los vecinos, ni mejor, ni peor; que podamos depositar nuestros residuos a una distancia razonable de nuestras casas y que no nos coman los lobos por el camino; que nuestras farolas iluminen. Y si alguno de nosotros aparca mal, sobre la acera por ejemplo, que se nos multe.

A nosotros y a todo aquel que lo haga sea en la zona que sea de Arganda.


Esta foto está tomada el domingo 25 de noviembre a las 12:00 horas en la calle Solidaridad, junto a la iglesia de San Sebastián Mártir. Todos los coches que aparecen en la foto están aparcados sobre la acera. Todos han tenido que recorrer un buen tramo de la misma para llegar a su ubicación definitiva. Todos, tal y como advierte la nota de la Policía, han comprometido la buena marcha de la circulación y todos han arriesgado la seguridad de los peatones. No quiero pensar que ellos no han sido multados, ni tan siquiera advertidos de su conducta temeraria, porque todos ellos llegaban tarde a misa.

Por cierto, uno de los dos Audi A6 que se ven en la imagen mal aparcados y que han arriesgado la seguridad de los peatones pertenece a un miembro del equipo de Gobierno Municipal. Voy a ser discreto y no voy a dar el nombre, pero si daré una pequeña pista: pertenece al Concejal  de Mayores, Integración y Bienestar Social.


Tengo la sensación de que Arganda se parece cada vez más a la granja que describía Orwell en su novela Animal Farm, donde los cerdos terminaban asumiendo el poder bajo la máxima Todos los animales son iguales, pero algunos animales son más iguales que otros.


viernes, 23 de noviembre de 2012

AGUDEZA VISUAL



Les voy a proponer un juego de agudeza visual. En la foto que tienen sobre estas líneas aparecen tres servicios cuya competencia corresponde al Ayuntamiento; la recogida de basura, el alumbrado público y el control del tráfico, incluyendo el aparcamiento. Aunque la calidad de la imagen no es digna del Pulitzer de fotografía, permite observar los medios para la prestación de estos tres servicios; contenedores de basura, una farola y una señal de tráfico prohibiendo aparcar.

Como si del 50x15 se tratara, les lanzo una pregunta sobre la foto con cuatro posibles respuestas. Por si necesitan utilizar el comodín de la llamada, les informo que la imagen está tomada en el número 12 del Paseo de la estación de Arganda del Rey, junto a la parada de Metro.

Trascurridos 10 meses desde que se entregaron las viviendas ¿cuales de los servicios fotografiados está prestando el Ayuntamiento?
A) Los 3; recogida de basuras, alumbrado público y control del aparcamiento.
B) Sólo se preocupan de multar a los coches mal aparcados.
C) Recogida de basuras y alumbrado público.
D) No sabe / No contesta.


Si han contestado la opción A) son ustedes unos ilusos o en su defecto miembros o familiares del Partido Popular o Nuevas Generaciones en Arganda y sólo tienen ojos para los bonitos y caros carteles con los que nuestro Ayuntamiento ha decorado la ciudad informando de que El deporte es salud.



La opción D) tampoco es la correcta. Estaba puesta para que los integrantes o simpatizantes del colectivo denominado Unión, Progreso y Democracia tuviesen un item con el que estar de acuerdo. A ellos estos pequeños problemas vecinales no les incumben porque se concentran en los temas que de verdad preocupan a la ciudadanía, como por ejemplo el censo de árboles del municipio o en trofeo al mejor par de banderillas de la Feria.


A los que se hayan decantado por la respuesta C) les tengo que advertir que son ustedes más ilusos aún que los que eligieron la primera. Tendría su lógica que el Ayuntamiento proporcionara la iluminación suficiente para poder acceder a nuestras casas de forma segura; la iluminación mínima para que pudiéramos esquivar los excrementos de canes que minan nuestras aceras.

Sería de esperar que los dirigentes de la localidad nos proporcionaran un lugar donde poder depositar nuestros residuos correctamente segregados. Lamento comunicarles que hace meses que, debido a su buena gestión, el Ayuntamiento de Arganda tuvo que dejar de realizar la recogida selectiva  de la basura para poder hacer frente al pago del servicio. Pueden ustedes dejar de hacer el canelo llenando sus terrazas de bolsas con envases que luego el munícipe de la cosa ordena mezclar en los camiones con los restos orgánicos.

Y es precisamente esta buena gestión la que hace que, desgraciadamente, la respuesta correcta sea la B). El pésimo control de las finanzas municipales de los últimos años hace que los vecinos tengamos que prescindir de ciertas comodidades. Bien pensado, tiene su lógica y son todo beneficios. Contenedores de basura en estado lamentable como los de la imagen impiden que los usuarios puedan llenarlos de basura reduciendo así la ruta del camión de recogida con el consiguiente ahorro de combustible. ¿Qué problema hay? ¿Que los vecinos tienen que desplazarse 200, 300 ó 400 metros para depositar sus bolsas? ¿Es que no se fijan en los carteles? El deporte es salud. ¿Que esos contenedores 'próximos' no admiten más basura y rebosan y hay que dejar las bolsas sobre la vía pública? Eso no es necesariamente malo; estamos dando de comer a los animales callejeros que también son hijos de Dios.

El beneficio de las farolas es más evidente aún. Nos llenamos la boca hablando de nuevas tecnologías, de luces halógenas de nueva generación, de iluminación por LEDs. Tonterías. No hay nada que consuma menos que una farola sin bombilla.

Sin embargo nuestro Ayuntamiento no tiene piedad para con los coches mal aparcados (en según que zonas, Los Villares, por ejemplo, no cuentan). Y es que no entiende nuestra manía de querer aparcar junto a nuestras viviendas. Una y otra vez se nos olvida que El deporte es salud y por eso tienen que gastarse el dinero poniendo los dichosos carteles. Pero no se preocupen, cuando todos sus amigos hayan conseguido alquilar sus plazas de garaje ya se pondrán manos a la obra y solucionarán el tema del aparcamiento en Arganda. Mientras tanto lo importante es recaudar.

Seamos vecinos responsables. Seamos austeros en la utilización de los servicios públicos. Paguemos sin rechistar tasas, impuestos y multas pese a sus salvajes incrementos. El Ayuntamiento necesita nuestro dinero. Necesita conseguir fondos para llenar Arganda de gigantes carteles que recuerden a todos sus habitantes algo muy importante en estos tiempos de crisis, que El deporte es salud.

viernes, 16 de noviembre de 2012

CARTA ABIERTA A Mª DOLORES

Estima María Dolores, le escribo estas líneas no en su calidad de Presidenta de Castilla la Mancha; ni tan siquiera en su calidad de Secretaria General del Partido Popular; sino como Consejera Delegada consorte de Capio Sanidad. Ha llegado hasta mi conocimiento que la empresa de su marido está haciendo méritos para adjudicarse la gestión de los hospitales que está vendiendo su compañero Ignacio González.

He perdido toda esperanza de que su partido escuche a la ciudadanía y a los profesionales sanitarios, por lo que dando por sentado que la privatización va a producirse, me permito dirigirme a usted por si tiene a bien trasmitirle mis consideraciones a su esposo.

Por motivos personales que no vienen al caso, he pasado los tres últimos días en el hospital, en uno de los de verdad, de los grandes, de los de nueve plantas. El tiempo aquí pasa muy despacio y, como menos dormir y fumar, se puede hacer casi cualquier cosa, he estado observando y meditando sobre las cosas que debería cambiar su Ignacio cuando asuma el Servicio Público Sanitario. No voy a entrar a valorar el trabajo y la capacidad de nuestros profesionales médicos, ya que como sus mentes liberales ya saben, eso no es lo verdaderamente importante en un hospital, y sin más preámbulos voy al grano, a lo que de verdad importa:
  • No es de recibo que todos los trabajadores de un hospital público vistan de verde, azul o blanco arbitrariamente. Así no hay manera de distinguir un celador de un neurocirujano, y esto es del todo inadmisible en esta nueva sociedad clasista a la que nos encaminamos.
  • El café es muy malo y pasan trece interminables horas entre la cena (20:00h) y el desayuno (9:00h). Un servicio de habitaciones y un minibar en la habitación haría mucho más agradable la estancia de enfermos y familiares.
  • El descanso nocturno es prácticamente imposible ya que ésto está lleno de gente que tose, se queja y llama una y otra vez a las enfermeras porque se vacían sus goteros. Espero sinceramente que Capio Sanidad sea mucho más exquisito con el derecho de admisión.
  • Pero lo que realmente funciona mal, lo que realmente crispa los nervios a cualquier ciudadano de bien, lo que enerva al más paciente, es el mal uso que se hace de los ascensores. ¿Por qué demonios (discúlpeme la expresión, pero es que es superior a mis fuerzas) alguien que quiere subir de la planta 0  a la planta 6, le da al botón de bajada del ascensor?¿Por qué una persona que habita la planta 7 y quiere bajar a la cafetería que normalmente está en la planta 1 pulsa el botón de subida? (...) y para el ascensor cuando sube, y se monta, y sube hasta la planta 9, y luego ya baja, y vuelve a parar en la planta 7 porque también le pulsó al botón de bajar (...)
Estamos utilizando los ascensores de los hospitales por encima de nuestras posibilidades. Ya que estamos en proceso de retroceso de unas décadas en materia penitenciaria, espero que por el bien del negocio familiar, le pida a su compañero Alberto, que retroceda un poquito más aún, y cambie la ley para que se castigue con la amputación de las falanges a quien reincida en este comportamiento tan molesto y tan perjudicial para el Estado de Bienestar.

martes, 13 de noviembre de 2012

TU SALUD NO SE VENDE, SE DEFIENDE

Ojos que no ven, corazón que no siente. Eso es lo que deben de pensar los estrategas del Partido popular en materia de sanidad. Si no, no se entiende que hace dos semanas nos echaran de la puerta del hospital de Arganda mientras recogíamos firmas en contra del medicamentazo y que la semana pasada, una vez conocida la intención del Heredero de vender o privatizar el Hospital del Sureste, un vigilante de seguridad me hiciera borrar del teléfono la foto de una pancarta mientras esperaba en la sala de espera de urgencias.

La Comunidad de Madrid ha decidido privatizar media docena de hospitales y convertir en geriátricos otro par de ellos y todavía esperan que la gente no se de cuenta, o por lo menos que no sea consciente de las consecuencias que ello va a tener.

Piensan que todo el mundo lee La Gaceta o ve TeleMadrid (por suerte no y por eso ambos están al borde de la quiebra) y que va a calar el mensaje de que   empresas privadas van a gestionar mejor la sanidad pública que la propia Administración. Y además nos va a salir más barato.

Ésto es mentira, ya que el sistema de pagar a una empresa una cantidad fija por número de habitantes asignados sale, en muchos casos, más caro que la asignación que se hace en el presupuesto de la Comunidad. Pero es que además es tremendamente peligroso, pues es poner nuestra salud en manos de criterios mercantiles.

Sirva de ejemplo para explicar este riesgo el caso que nos contaba la semana pasada un compañero. Hace unos meses acudió a las urgencias de la Fundación Jiménez Díaz con un fuerte dolor en el abdomen. Para el que no sea de Madrid aclararé que la Fundación Jiménez Díaz es un hospital privado que da cobertura a la sanidad publica y que saltó tristemente a la fama por el triple homicidio de la Dra. Mingo en 2003. Lo que quizá es menos sabido es que el hospital es propiedad de Capio Sanidad, cuyo Consejero Delegado es Ignacio López del Hierro, a la sazón, marido de la Secretaria General del Partido Popular y Presidenta de Castilla la Mancha, María Dolores de Cospedal. Capio Sanidad tiene además todas las papeletas para adjudicarse la gestión de los seis hospitales que ha puesto en venta Ignacio González.

A los efectos de esta historia, la Fundación Jiménez Díaz era el hospital público de referencia, de gestión privada, al que debía acudir el compañero en caso de urgencia. Nada más entrar por la puerta pudo disfrutar de las ventajas de la eficiente gestión privada de la sanidad; fue atendido en dos minutos. Tras la exploración y el resultado de una analítica como pruebas diagnósticas, le enviaron a casa a pasar el fin de semana sin concretarle el origen de su dolencia, diciéndole que si el dolor persistía volviera el lunes y entonces, quizá, le hicieran una ecografía. Obviamente, los dolores persistieron durante el fin de semana y además apareció la angustia de no saber lo que le ocurría.

El lunes acude a su médico de cabecera el cual se asusta al ver la analítica y le envía a las urgencias del 12 de Octubre, uno de esos grandes hospitales públicos que tanto repelús le dan al PP. Como en todo hospital público mal gestionado que se precie, nuestro protagonista tiene que esperar la friolera de treinta minutos en una abarrotada sala de espera.

Sin tener en cuenta las mermadas arcas de nuestra Comunidad, los derrochadores doctores pasan su abdomen por los rayos X. Como el gasto no les parecía suficiente y con la excusa de que no habían dado con el origen del dolor, le hacen una ecografía que tampoco da con la causa de su mal. En un alarde de irresponsabilidad presupuestaria, continúan haciendo carísimas pruebas hasta que, tras un TAC, descubren que por algún motivo su riñón izquierdo había dejado de funcionar. Una insignificancia para tanto gasto.

He tenido que echar mano de la ironía para poder contar ésto sin que de mi teclado salieran palabras malsonantes. Este es el futuro al que nos enfrentamos si no reaccionamos y paramos este despropósito a tiempo permitiendo que el coste de una prueba diagnóstica y no la necesidad de utilizarla sea lo que determine nuestra buena o mala salud. No permitamos que nos apliquen criterios económicos en lugar de médicos cuando enfermamos.

Quieren hacernos creer que con la privatización de los hospitales sanearemos nuestras cuentas sin menoscabar nuestra salud, que tan sólo se trata de un cambio de modelo de gestión y a lo mejor de nombre como las paradas de Metro. No me extrañaría nada que el Hospital del Sureste pase a llamarse Hospital Hagen-Dazs Arganda. Pero no nos dejemos engañar, nadie da duros a cuatro pesetas. Empezaba tirando de refranero con el ojos que no ven corazón que no siente; no corramos el riesgo de que nos lo cambien por ojos que no ven corazón que no late.